Película para no dormir

2004

Video digital
11 minutos


De acuerdo con Benet, la experimentación fílmica de los años 20 del siglo pasado se
ubicaba en tres ámbitos: el esencialismo, desarrollado a partir de imágenes
abstractas; la exploración de las posibilidades de la edición en cuanto elemento
central del lenguaje cinematográfico y la representación de la subjetividad, el
simbolismo y los terrenos oníricos. Este cortometraje remueve las bases de las
posibilidades de acercamiento entre el cine como arte en construcción y el
surrealismo como tendencia efectiva. El cine entonces y hasta ahora estableció vasos
comunicantes con las diversas tendencias artísticas. Desde La concha y el clérigo de
Dulac al Entreacto de René Clair pasando por La sangre de un poeta de Jean
Cocteau se establecen conexiones entre imagen y palabra difíciles de deshacer. Estas
conexiones entre el arte cinematográfico y la poética traslada toda una geometría
literaria, por una parte por carecer de una tradición de pensamiento imagen-tiempo
y en la medida en la que se le deseaba emparentar con las formas artísticas
tradicionales, las metáforas-imagen nacían necesariamente como metáforas-palabra.
Este pequeño film presenta una serie infinita de perros de aguas saltando hacia atrás
al son de una nana, sueño que no puede ser por casualidad ni para la casualidad