"El que podamos descomponer, un ciervo por ejemplo, en cientos de filetes, no implica que juntando ese mismo número de filetes se consiga un ciervo, por ejemplo"

Thomas R.

"Igualmente se sabe que la piel (superficie del cuerpo) y el cerebro (superficie del sistema nervioso) derivan de la misma estructura embrionaria, el ectodermo.

Para mi, como psicoanalista, la piel tiene una importancia capital: proporciona al aparato psíquico las representaciones constitutivas del Yo y de sus principales funciones. Y, en su momento, esta constatación se inscribe en el cuadro de la teoría general de la evolución. Desde los mamíferos hasta el hombre, el cerebro no solamente aumenta sino que se hace más complejo. La piel pierde su dureza y sus pelos. Los pelos subsisten apenas sólo en el cráneo, aumentando su papel protector del cerebro, y alrededor de los orificios corporales de la cara y del tronco, donde refuerzan la sensibilidad e incluso la sensualidad. Como demostró Imre Hermann, la pulsión de agarramiento de cualquier pequeño a su madre es más difícil de satisfacer en la especie humana y se manifiesta en las angustias intensas precoces y prolongadas de pérdida de la protección, de falta de objeto soporte y en un desamparo que ha sido calificado de originario. Como contrapartida, la pulsión de apego toma, en el pequeño humano, una importancia tanto más considerable cuanto que la infancia humana es proporcionalmente más larga que la de otras especies. Esta pulsión tiene por objeto la localización, primero en la madre y después en el grupo familiar que toma el relevo, de las señales—sonrisa, suavidad del contacto, calor físico del abrazo, diversidad de emisiones sonoras, solidez del transporte, acunamiento, disponibilidad para dar el alimento, los cuidados, la compañia—que proporcionan indicios de la realidad exterior y de su continuidad, por una parte, y, por otra, de los afectos vividos por la compañera, especialmente como respuesta fundamental a los afectos del bebé. Nos encontramos aquí ya no en el registro de la satisfación de las necesidades vitales de autoconservación (alimento, respiración, sueño) sobre las que los deseos sexuales y agresivos van a constituirse por apuntalamiento, sino en el de la comunicación (preverbal e infralingüistica) sobre la que el intercambio de lenguajes encuentra oportuno apoyarse"


Didier Anzieu